Inclusión

En el Quindío y en el mundo es necesario hablar de discapacidad

Actualmente, las instituciones públicas y privadas, la academia y la ciudadanía en general tienen grandes retos en temas de inclusión frente a las personas con discapacidad.


En un mundo donde la discapacidad no se puede ver como una limitación inherente a las personas, sino como el resultado de barreras sociales y físicas que dificultan su plena participación en la sociedad, la inclusión se presenta como una solución para garantizar la igualdad de oportunidades. En esto, la Organización de las Naciones Unidas, ONU, define la discapacidad como el resultado entre las deficiencias de las personas y los obstáculos del entorno, que impiden el desarrollo integral y la participación activa en la comunidad.

En respuesta todo esto, según la Ley 1618 de 2013 la inclusión surge como una respuesta para intentar minimizar o eliminar las barreras que existen en el entorno y potenciar, visibilizar y generar los espacios necesarios para la participación de la población con discapacidad en la sociedad, protegiendo el derecho a la educación, el acceso a la salud, la movilidad, el trabajo, el ocio y tiempo libre, entre otros.

La discapacidad en el Quindío

El departamento del Quindío enfrenta un panorama desafiante en cuanto a la inclusión de personas con discapacidad, ya que se estima que cerca de 43,000 habitantes, un 8,4% de la población, se encuentran en esta condición.

Sin embargo, uno de los mayores retos es la baja tasa de escolarización, donde un 30% de los niños y jóvenes con discapacidad están fuera del sistema educativo. Además, la tasa de empleo de esta población es alarmantemente baja: solo un 22,4% de las personas con discapacidad en edad laboral están empleadas, en contraste con el 58,5% de la población sin discapacidad.

A pesar de que existen normas que promueven la inclusión, como la Ley 1618 de 2013 y el Decreto 1421 de 2017, existe una resistencia social y cultural para implementar medidas que garanticen la integración efectiva de esta población, es aquí donde profesionales en neurodesarrollo y educación juegan un papel crucial.

Importancia de la academia

Buscando aportar a los retos planteados, la Universidad Alexander von Humboldt, en convenio con la Universidad CES, viene trabajando por posicionar la Especialización y la Maestría en Neurodesarrollo y Aprendizaje; programas académicos diseñados para formar expertos en la comprensión y atención de personas con discapacidad y trastornos del neurodesarrollo, como el autismo, el TDAH y las discapacidades intelectuales.

Dicho programa académico combina teoría y práctica, capacitando a los estudiantes para diseñar entornos educativos inclusivos mediante estrategias de accesibilidad, como el Diseño Universal para el Aprendizaje, DUA, y el desarrollo de Programas Individualizados de Apoyo, como el Plan de Ajustes Razonables, PIAR.

Este enfoque integral busca que estos futuros profesionales sean agentes de cambio en la creación de una sociedad más equitativa, más incluyente, consciente de la diversidad y comprometida con la participación activa de todas las personas, independientemente de sus capacidades.